Unicornio, de buscar un océano azul a buscar la disrupción

La disrupción y la aparición de unicorniosLa disrupción es la tónica hoy en día. Hemos evolucionado de vivir en un ecosistema en que las empresas buscaban entornos donde la competencia era prácticamente nula, los famosos océanos azules, a un momento en que a las empresas no les importa cuánta competencia haya en su sector. De hecho, cuanta más, mejor. Esto se traduce en que sus beneficios serán mayores o que su capitalización bursátil se disparará una vez salgan a bolsa.

Son los efectos de la digitalización, una compañía es capaz de ser la rookie del sector y a la vez crear una disrupción capaz de dejar fuera de juego a los dinosaurios del mismo, a esos que no han sabido adaptarse. Esas torres que se creían demasiado altas como para caer. Casos como el de Uber o Airbnb son un claro ejemplo.

Disrupción condensada: los Unicornios

Este nuevo paradigma rompe los esquemas de muchos, salta las alarmas de otros que dicen estar presenciando una burbuja comparable a las de las punto com y hace que miles de inversores se froten las manos pensando en cuánto van a ganar con el próximo Unicornio.

Así se las llama en el argot, empresas cuya valía es superior al billón de dólares (como nota comentar que el concepto de billón americano nada tiene que ver con el que tenemos en mente, hace referencia a mil millones, que tampoco está nada mal)

Estas empresas son sabedoras de que se encuentran en un período en el que pueden tomar las riendas de un sector con una inversión mínima, mediante la creación de valor de una manera diferente, gracias a la digitalización y normalmente desde una app. Les es fácil expandirse, es el propio usuario quien las usa porque le parecen una mejor opción, esa es su mejor baza.

Imaginen comenzar ahora internet en otro planeta, ¿sería divertido, verdad? cientos de dominios serían comprados con avidez y miles de personas comenzarían a crear en base a la experiencia que ya tienen.

La principal diferencia es que estos millennial que están creando startups con el ánimo alevósico de llevarse por delante todo lo que puedan, no lo hacen en base únicamente a lo que saben, lo hacen combinando esto con las necesidades que no tienen satisfechas. Como nativos digitales, puede que esté ahí su verdadera ventaja, en saber reconocer las necesidades de un público al que conocen porque forman parte de él.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *